domingo, 11 de noviembre de 2012

Al amparo



y en la sombra de tus alas
me ampararé
hasta que pasen los quebrantos
Salmo 57: 1b

Solo Dios puede dar protección, consuelo, seguridad y todo el sustento necesario en el tiempo de la adversidad. 
Cuando ya hemos clamado, le hemos contado al Señor nuestras angustias, le hemos dicho que confiamos en su misericordia, lo que resta es esperar confiadamente en el refugio eterno, bajo  la sombra de sus alas... hasta que pasen los quebrantos. Esta es la manera en que dejamos que el poder de Dios actúe; con serenidad y quietud nos entregamos a su amoroso cuidado.

Pintura: Daniel F. Gerhartz 

2 comentarios:

Quartier Latin dijo...

Reconfortantes palabras. Me encanta la imagen.
¡Feliz domingo!

Clarissa Rodriguez dijo...

¡Feliz domingo para ti también, Quartier Latin!

Esta actitud aparentemente pasiva, en realidad significa poner en acción nuestra fe y nuestra esperanza.
"Me ampararé". Puedo esperar con toda confianza porque Dios tiene todo bajo su control.

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