miércoles, 11 de septiembre de 2013

No duerme ni se adormece



No permitirá que tu pie resbale;
jamás duerme el que te cuida.
Jamás duerme ni se adormece
el que cuida de Israel.
Salmo 121: 3, 4

Mantenerse en vigilia permanente no es una caracteristica humana. Necesitamos dormir, que es ese estado fisiológico de autorregulación y reposo en que todo el cuerpo descansa. Por tanto, dormir es una función vital, no se puede vivir sin dormir. La reducción de las horas habituales de descanso se conoce como privación del sueño; sus efectos son tan adversos,  que ha sido usado como método de tortura y también se usa como medida complementaria para el "lavado de cerebro"-
Hay muchos aspectos de la naturaleza donde también se ve reflejado este acto rítmico de reposo-vigilia, sueño-actividad, sonido-silencio. Es parte del diseño divino.

Dios no duerme, ni se adormece, su permanente estado de actividad es casi incomprensible para nosotros, en ese sentido, como en tantos otros, Dios es muy distinto al ser humano.  El salmista refuerza esta idea repitiendo la frase "jamás duerme".
La perfección de Dios quizás no la podríamos describir pero nos afirmamos por fe, en lo que Dios mismo nos ha revelado de si mismo. El Evangelio según San Juan dice que: Dios es Espíritu, y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren.

Junto al salmista, nos entregamos, al cuidado amoroso de Dios, que en su vigilia permanente, nos brinda una protección sostenida en el tiempo que nos permite vivir confiados en su misericordia, porque:
No permitirá que tu pie resbale;
jamás duerme el que te cuida.

Pintura: Seth Fitts

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...